El árbitro Brandon Pacheco ignoró las reglas del torneo y prolongó el partido con tiempo extra, generando confusión y malestar entre los equipos.
El partido de vuelta de cuartos de final entre FAS y Dragón estuvo marcado por una polémica decisión arbitral que desató controversia entre los involucrados. Luego de un empate global 2-2, el árbitro Brandon Pacheco, en contra de lo establecido por las bases de competencia, determinó que el encuentro debía ir a tiempo extra. Según las reglas del torneo, en caso de empate global, la serie debe resolverse mediante una tanda de penales, pero el árbitro insistió en su decisión de alargar el tiempo de juego.
A pesar de los esfuerzos de los técnicos de ambos equipos y del gerente de la liga, quienes intentaron corregir la situación antes de que iniciara el tiempo extra, el árbitro se mantuvo firme en su resolución. La controversia alcanzó su punto máximo cuando, a tan solo 30 segundos del final del tiempo adicional, el árbitro sugirió nuevamente llevar el partido a penales, pero FAS se negó a aceptar esta propuesta y continuó hasta el término del tiempo extra.
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El partido culminó con una victoria para FAS por 5-2 en el global tras el tiempo extra, pero el incidente dejó una fuerte duda sobre la imparcialidad y el cumplimiento de las normativas del torneo.
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