El Salvador enfrenta este jueves por la noche en el estadio Cuscatlán por tercera vez en este año a la selección de Bonaire, convencidos que el tiquete directo hacia la Copa Oro y el retorno a la categoría A de la Liga de Naciones se pueden quedar en casa con un triunfo sobre los caribeños.
La selección de El Salvador buscará este jueves 14 a partir de las 7 de la noche en el estadio Cuscatlán ante su par de Bonaire sus dos principales objetivos en el torneo regional: el ascenso directo a la Liga A para el próximo torneo y obtener además el boleto directo a la Copa Oro de la CONCACAF del próximo año.
Ambos objetivos fueron truncados de tajo en la ventana FIFA del mes anterior cuando cayeron 1-2 a manos de San Vicente y Las Granadinas en el cierre de la jornada cuatro de la categoría B de la Liga de Naciones de la CONCACAF que se desarrolló en la isla de los vicentinos cuando fueron anfitriones de la doble jornada FIFA de octubre.
El técnico español, David Dóniga Lara, reconoció que ambos objetivos sólo se pospuso un mes y que jugando en el Cuscatlán y ante su afición, la Selecta puede celebrar este jueves su ascenso y su clasificación a Copa Oro, toda vez que logre mostrar su mejor nivel y estado físico ante un rival que también está viviendo su propia lucha por no descender a la categoría C.
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“Estamos conscientes que nuestros objetivos siguen latentes, lo sucedido el mes pasado en el Caribe en el último juegos que sostuvimos son circunstancias que el fútbol tiene, pero eso no impide que busquemos en casa esos dos logros que nos propusimos desde que entramos en competencia en esta Liga de Naciones”, expresó el técnico ibérico.
El técnico de la selección de Bonaire, Rilove Janga, ha convocado a 20 jugadores en procura de alcanzar su principal objetivo, el poder mantenerse en la categoría una temporada más, luchando por ese objetivo con Montserrat.
En la nómina viene incluido el atacante Freadyen Michiel del club Life Running Eagles de la Universidad de Life de la ciudad de Marietta en Georgia y quien formó parte del plantel que enfrentó por primera vez a El Salvador en su historia el pasado 20 de marzo en los Estados Unidos cuando empataron en ese amistoso a un gol.
Bonaire ha recuperado al volante de marca, Richajier Oleana y al volante Adri Serberie luego de pagar ambos un juego de suspensión por acumulación de dos tarjetas amarillas, pero debe cuidarse porque de los siete futbolistas que tiene apercibidos en las cuatro fechas anteriores, ante El Salvador posee a cuatro jugadores con tarjeta amarilla en su nómina: al volante Jonathan Libania, al lateral derecho, Amir Winklaar, al defensor central Railey Martijn y al volante por la izquierda, Berry Sonnenschein.
No viajaron con la delegación el atacante Siginho, ni el volante Ginel Ronde ni el defensor Jurneth Clara.
Por su parte, El Salvador afronta este juego ante Bonaire sabedor que no contará con el defensor central del Águila, Julio Sibrián, quien deberá pagar un juego de suspensión luego de recibir su segunda tarjeta amarilla en el juego anterior ante San Vicente y Las Granadinas, pero a su vez, recupera al defensor Jorge Cruz del Once Deportivo luego de no jugar en la última jornada de la fecha FIFA de octubre ante los sanvicentinos.
Dóniga ha manifestado que ante el hecho de contar en su nómina con seis jugadores apercibidos en el torneo ha decidido manejar de otra manera el grupo que ha convocado con el propósito de tener al menos dos opciones en cualquier puesto sobre la cancha.
Fue por ello que no convocó al defensa aguilucho, Melvin Cruz, el único de los jugadores con tarjeta amarilla que posee la Selecta en la justa regional, mientras que los defensores Rudy Clavel, Alexander Larín y Tereso Benítez, junto al volante Jairo Henríquez y el atacante Rafael Tejada deberán cuidarse para no ser amonestados este jueves por la noche ante Bonaire si quieren mantenerse en la idea táctica del profesor Dóniga para el juego del domingo próximo ante Montserrat en el cierre de la fase de grupos del torneo.
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