
La joven de 12 años está dando pasos importantes en el deporte nacional y cada vez va superando obstáculos en un deporte que no está apto para cualquiera.
Kenia de la Cruz es una joven escaladora de 12 años que pretende llegar a lo más alto a nivel nacional. La atleta se ha tenido que sobreponer a muchas dificultades, pero junto a su padre está dando pasos importantes en la escalada salvadoreña llamando la atención de personas en Centroamérica. Fotos cortesía
Kenia de la Cruz es una joven escaladora de 12 años que pretende llegar a lo más alto a nivel nacional. La atleta se ha tenido que sobreponer a muchas dificultades, pero junto a su padre está dando pasos importantes en la escalada salvadoreña llamando la atención de personas en Centroamérica.
Kenia y la escalada siempre han ido de la mano desde que tenía un año. Pese a que se trata de un deporte con altos riesgos sobre todo en las rutas de montaña, la escaladora no se deja amedrentar ante la adversidad y se concentra en la fuerza para superar los obstáculos.
“La escalada trata de fuerza y eso me gusta porque lo hace a uno fuerte en lo mental. Desde mi primer año me subía al puerta balcón de la casa. Siempre he entrenado con mi papá, me enseña cosas interesantes. Lo más difícil de la escalada son las rutas largas y las que consisten en más fuerzas. Cuando salimos a las montañas me gusta escalar en esas rocas y ver los paisajes”, comentó Kenia.
A sus 12 años, Kenia ya da indicios de una escaladora profesional compitiendo en categorías mayores a su edad y tanto es el amor en la escalada que ella quiere instruirles a las futuras generaciones cuando sea grande. “Quiero ser instructora de escalada en el futuro y quiero enseñarles lo que he aprendido en mi vida. A veces me pongo nerviosa cuando compito con otros niños mayores que yo, pero estoy motivada y solo hay que decir ‘no tengo miedo”.
Por su parte, el padre de Kenia, Isaac Herrera es el entrenador de la escaladora y aprovecha su experiencia para enseñarle todos los secretos a su hija. Herrera fue un escalador desde sus 19 años y participó en varias competencias a lo largo de su vida para luego heredar el amor por el deporte a su hija. Pese a que en un inicio Isaac no quería que Kenia practicara escalada, la personalidad de Kenia y su adicción por trepar muros hicieron que siguiera los pasos de su padre, a quien no le quedó más remedio que entrenarla.
“Yo estuve compitiendo desde los 19 años en escalada deportiva representando a El Salvador y es un deporte bien difícil y en un momento pensé que era mejor que Kenia no escalara pero ella lo heredó y tocó impulsarla. Desde muy pequeñita, antes de caminar ya se subía a una puerta balcón en la casa. Nosotros teníamos un muro en la casa y ese era su juguete prácticamente”, explicó Isaac.
Aparte de los inicios de Kenia, Herrera también comentó la actitud que ha tenido su hija con la escalada y cómo ha sido la rutina de entrenamiento de Kenia y las dificultades que han tenido que afrontar al no ser un deporte popular en El Salvador pero que han logrado salir adelante gracias al Move Wellness Lab.
“Kenia es bien persistente y en la escalada es bien difícil mantener eso. Ella intenta hasta que logra la ruta y ha aprendido bien rápido pese a las dificultades como que la Puerta del Diablo no esté disponible o que la federación no tenga instalaciones. ‘Move’ nos ha abierto las puertas y le ha dado una beca para que pueda crecer deportivamente y lo hemos aprovechado.
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Hay que mencionar que Kenia practica la escalada de manera oficial desde los cinco años en las modalidades boulder, roca y artificial y actualmente ostenta los primeros lugares en dichas modalidades y es la mejor en el ranking juvenil de FSME en el año 2023. Aparte de las competencias que organiza la federación de escalada, en su tiempo libre Kenia también escala lugares turísticos de El Salvador como los volcanes de Izalco y Lamatepec aparte del Cerro Verde, rutas que ha realizado 16 veces a su corta edad.
Aparte de sus hazañas, Kenia también ha logrado convivir con figuras importantes de la escalada como Edu Marín. La escaladora salvadoreña estuvo en un convivio en Costa Rica a sus seis años y tuvo la oportunidad de conocer a uno de los mejores del mundo en la modalidad roca como el español Edu Marín.
Si bien Kenia está realizando marcas importantes a nivel nacional, el objetivo de la familia es que la escaladora trascienda a nivel internacional y es por eso que la joven de 12 años tiene que foguearse con los mejores del mundo para lograrlo.
“Hace dos semanas ella en la roca sacó una ruta regular y en la zona no hay un niño de 12 años que lo haya logrado y prácticamente es una hazaña. Lo que estamos tratando de hacer es ir a un campamento en España para mejorar la competitividad porque estamos años atrás en eso. Kenia está aprendiendo muy rápido y queremos que vaya a ese campamento por lo menos un mes y medio para que se empape de las competencias”, dijo el padre de Kenia.
Es importante señalar que, en el presente mes de marzo, Kenia recibió la carta desde España donde Kenia estará en un campamento en la ciudad de Barcelona para entrenar en el campamento CCT21 desde el 6 de mayo hasta el 30 de junio. Esto le permitirá a Kenia darse a conocer a nivel internacional y mejorar su rutina con rutas más retadoras y aumentar sus pasos en la escalada.
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