La actividad económica registrada en septiembre en El Salvador, medida a través del Índice de Volumen de Actividad Económica (IVAE), creció 1.81% una cifra que a juicio de los economistas, confirma una desaceleración de la economía y una alerta de que será difícil cumplir  las proyecciones de crecer a más del 3% del producto interno bruto (PIB). 
 

Según el Banco Central de Reserva (BCR), el dato de septiembre es menor al crecimiento de la actividad económica registrada en julio y agosto, cuando se creció a 2.18% y  2.48%, respectivamente.
Este mes, son los  sectores de agricultura, industrial, la construcción y las actividades inmobiliarias, los que tienen una caída en su actividad económica.
 

Según el economista Otto Boris Rodríguez, en el caso del sector industrial, este se ha visto afectado por los bajos niveles de Inversión Extranjera Directa (IED). 

La  Cámara Textil Confección y Zonas Francas (CAMTEX) confirmó la semana pasada que prevé una reducción del 10% en sus exportaciones, debido a la demanda de productos, sobre todo de Estados Unidos.
En el caso del sector agropecuario, Rodríguez señala que se debe a la falta de una buena política agropecuaria, que impulse la producción nacional. 
 

Las importaciones de productos agropecuarios, que van desde el maíz, los frijoles, frutas y verduras, lejos de disminuir, han ido incrementando, lo que deja en desventaja la producción local.

El sector construcción tuvo un crecimiento interanual del 2% en septiembre, pero desde junio mostraba datos negativos de -17.92% y  -10.57% en julio y ya en agosto, apenas subió 0.23%.
Los datos contrastan con las proyecciones optimistas de la Cámara Salvadoreña de la Construcción (CASALCO), que afirma que al final del año, el sector tendrá un crecimiento del 18%, similar a 2023.
 

En el caso de las actividades inmobiliarias, su crecimiento interanual ha sido de 2.10%, un dato menor a los de hace dos meses, cuando registraba crecimientos de más de 4%. Para Rodríguez, será difícil que el país alcance un crecimiento del 3% del PIB, como lo ha dicho el BCR. “Es probable que se llegue cerca del 2%, porque se ha caído el sector construcción, se han desacelerado las remesas y ha comenzado de alguna forma impacto del ajuste fiscal, con los despidos que desalientan la demanda”, afirmó  el economista.