Loading...

Surgen protestas en varios lugares del mundo debido al exceso de turistas

Las consecuencias por la saturación de turistas son palpables en distintas partes del mundo: colas de tráfico, reportes de trabajadores de hospitalidad viviendo en carpas y protestas “antiturismo” en que personas hostigan a visitantes.

Enlace copiado
Enlace copiado

Los viajes se están disparando, impulsados por las ganas de compensar después de la pandemia.

Quien haya estado observando este verano de “sobreturismo” ha visto las consecuencias en distintas partes del mundo: colas de tráfico, reportes de trabajadores de hospitalidad viviendo en carpas y protestas “antiturismo” en que personas hostigan a visitantes en restaurantes o, como ocurrió en Barcelona en julio, disparándoles con pistolas de agua. 

Las demostraciones son ejemplo de los locales usando el poder de sus números y las redes sociales para darle a sus líderes un ultimátum: gerencien mejor este tema o ahuyentaremos a los turistas, y los $11.1 billones que traen cada año.

Culpan a los turistas de problemas como el aumento en los precios de las viviendas, el empeoramiento del tráfico y la escasez de agua. 

¿Qué es el ‘sobreturismo’? La frase por lo general se usa para indicar el punto en que los visitantes y los ingresos que generan dejan de beneficiar a la población local y más bien se convierten en un problema, al degradar sitios históricos, abrumar infraestructura y hacer más difícil la vida para los que viven allí.

Es un hashtag que le ha dado nombre a las manifestaciones de hostilidad contra los turistas. Pero si uno examina el tema con detenimiento, ve que detrás de él hay problemas más complejos, como la inflación de los precios de las viviendas impulsados por compañías como Airbnb, desde España hasta Sudáfrica. 
 
Algunas ciudades han empezado a fomentar el “turismo de calidad”, definido generalmente como un turismo en que los visitantes muestran más consideración hacia los locales, sin tanta borrachera, tomadera de selfies y otras conductas indeseadas. 

“El sobreturismo es quizás un fenómeno social también”, según un análisis para la Organización Mundial del Comercio escrito por Joseph Martin Cheer de la Universidad de Sydney Occidental y Marina Novelli de la Universidad de Nottingham. 

En China y la India, por ejemplo, las multitudes son más aceptadas. “Esto sugiere que las expectativas culturales de espacio personal y de exclusividad difieren de lugar en lugar”. 
En enero, la agencia de turismo de Naciones Unidas predijo que el turismo mundial superaría los récords fijados en el 2019 por 2%. 

Para fines de marzo, reportó la agencia, más de 285 millones de personas habían viajado internacionalmente por turismo, un 20% más que en el primer trimestre del 2023. Europa siguió siendo el destino más visitado. 

El World Travel & Tourism Council proyectó en abril que 142 de los 185 países que analizó fijarían récords de turismo, para ingresos totales de $1.1 billones y generando 330 millones de empleos. 

Pero aparte de generar ingresos, el turismo también ha causado problemas. España ha sufrido dificultades en cuanto a suministro de agua, alza en los precios de las viviendas y turistas ebrios.

Estallaron protestas en el país en marzo, cuando según reportes aparecieron grafitis en las paredes de Málaga llamando a los turistas a que se vayan. Miles de personas protestaron en las Islas Canarias, contra el turismo y la construcción que estaban abrumando los servicios de agua e inflando los precios de las viviendas. 

En Barcelona, los manifestantes insultaron y dispararon pistolas de agua contra personas que consideraban visitantes y que cenaban al aire libre en Las Ramblas. 

En Japón, donde se anticipa un récord del turismo debido a la debilidad del yen, Kyoto prohibió la entrada de turistas en ciertas callejuelas. El gobierno fijó un límite de las personas que pueden escalar el Monte Fuji.

La UNESCO ha advertido sobre daños potenciales a lugares protegidos. Y Fodor’s llamó a la gente a reconsiderar viajar lugares con problemas, como Grecia y Vietnam, o lugares con problemas de gestión de agua como California, India y Tailandia. 

El turismo está aumentando y evolucionando tanto, que, de hecho, algunos expertos dicen que el término “sobreturismo” ya está desactualizado. Michael O’Regan, conferencista en temas turísticos para la Glasgow Caledonian University, argumenta que “sobreturismo” se ha convertido en una muletilla que no refleja el hecho de que la experiencia depende en gran medida del éxito o fracaso de la gestión de multitudes. 

Las protestas, explica, no son contra los turistas sino contra las autoridades que permiten que el turismo cause daño en vez de beneficiar a la población local. 

“Ha habido una reacción en contra del modelo de negocios sobre el cual se ha construido el turismo moderno y la falta de respuesta por parte de los políticos”, dijo O’Regan en una entrevista. 

El turismo “repuntó más rápido de lo esperado”, admite, pero los turistas no son el problema. “Hay una competencia mundial para atraer turistas, eso no lo podemos ignorar ... Así que ¿qué ocurre cuando hay demasiado turistas? Los lugares tienen que investigar más a fondo el tema”.

Tags:

Lee también

Comentarios

Newsletter
X

Suscríbete a nuestros boletines y actualiza tus preferencias

Mensaje de response para boletines