La Fiscalía General de la República manifestó desconocer cómo sucedieron los hechos y si la familia había sido amenazada con anterioridad
Una bebé de un año y once meses de edad, identificada solo como Katerine J., fue asesinada al interior de su vivienda por personas desconocidas durante la mañana de este martes en el cantón Teponahuaste del municipio de Ciudad Barrios en el departamento de San Miguel.
Según la Fiscalía General de la República, la Policía Nacional civil recibió una llamada aproximadamente a las 7:30 de la mañana para informar que personas estaban dando gritos de auxilio al interior de la vivienda,trasladándose de inmediato al lugar y encontrando sin vida el cuerpo de la niña.
“Al interior de la vivienda hay varias manchas de sangre,y en el corredor junto a la pila se encontró el cadáver de una menor de un año con 11 meses, presenta una sola lesión específicamente a la altura de la cabeza“ dijo el fiscal del caso.
“Al interior de la vivienda hay varias manchas de sangre,y en el corredor junto a la pila se encontró el cadáver de una menor de un año con 11 meses,presenta una sola lesión específicamente a la altura de la cabeza“ dijo el fiscal del caso pic.twitter.com/kogLUtj4EB
— LPGDepartamentos (@LPGDptos) December 28, 2021
En este hecho también resultaron dos personas lesionadas con arma blanca y fueron trasladadas a un centro de salud. De manera extraoficial se conoció que las dos mujeres llevaban varias lesiones de gravedad, algunas de ellas a la altura del cuello y la cabeza.
Respecto al móvil y sobre cómo habría sucedido este hecho, la Fiscalía General de la República manifestó desconocerlos debido a que todavía se encontraban en proceso de investigación.
"Vamos hacer lo necesario para esclarecer este hecho, desconocemos el estado de salud y la versión de los hechos, sólo tenemos la versión de los policías que vinieron a ayudarles tras el llamado de algunas personas, estamos indagando por el momento", dijo una fuente fiscal.
Agregó que en el lugar también viven otras personas, pero estas no se encontraban cuando ocurrió el ataque.
Una fuente cercana manifestó que las víctimas llevaban varios años viviendo en ese lugar y no tenían problemas.
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