Tras las elecciones presidenciales de 2019 en El Salvador, los observadores de la Unión Europea recomiendaron modificar sanciones a delitos electorales, establecer criterios claros para considerar un voto como válido, debatir sobre la integración del Tribunal Supremo Electoral (TSE), permitir candidaturas independientes para la presidencia, mejorar la capacidad del TSE para auditar el financiamiento de los partidos políticos y transformar a la Televisión de El Salvador (TVES) y la Radio Nacional (RNES).

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El informe considera que el tiempo adecuado para poner en marcha estas reformas finaliza en marzo de 2020, un año antes de las próximas elecciones legislativas y municipales en El Salvador.

En total se hicieron 22 recomendaciones, pero estas seis son las que la propia Misión de Observación Electoral consideró más importantes:

1. "Ajustar las sanciones administrativas y penales por infracciones y delitos electorales para lograr una justicia electoral más efectiva con sanciones disuasivas y proporcionadas".

Los delegados europeos escribieron en su informe final que sanciones como multas bajas por la violación de la ley de propagan electoral y por la violación del silencio electoral no son disuasorios. En cambio, hay castigos que "tampoco son proporcionales" por destruir una papeleta, acto que se puede castigar con dos años de prisión.

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2. "Establecer criterios claros sobre la validez de la papeleta, que aseguren la prevalencia de la intención del votante sobre otras consideraciones e incluyan el mayor número de causales posibles sobre lo que constituye un voto válido o inválido, a fin de evitar confusión e interpretaciones partidistas".

Los observadores consideran que "no fue clara" la información sobre la validez de la papeleta. Los integrantes de las Juntas Receptoras de Votos (JRV), los primeros encargados de aplicar la ley electoral, tenían instrucciones contradictorias. El TSE argumentó que los miembros de las JRV hicieron más caso a las indicaciones de sus partidos políticos que a las del TSE.

3. "En el contexto de un panorama político renovado, con el fin de salvaguardar las funciones jurisdiccionales y administrativas del TSE y fomentar la confianza en el mismo, iniciar un debate sobre una posible reforma de la estructura y/o la composición del TSE en el que participe el más amplio espectro posible de partes interesadas".

En las elecciones presidenciales de 2019 existió confianza para los partidos representados en el TSE, pero no en los que están fuera de ese organismo, según la Unión Europea. 

Los observadores notaron que las personas que trabajaron en las elecciones (incluyendo juntas electorales departamentales y municipales) mantuvieron vínculos con partidos políticos, por lo que emitieron la siguiente guía: "Seguir desvinculando el TSE de influencia partidista mediante la despolitización de sus estructuras temporales y unidades administrativas para garantizar su neutralidad e independencia de los partidos políticos".

4. "Permitir candidaturas independientes en las elecciones presidenciales".

Esta recomendación de la Unión Europea requiere de enmiendas a la Ley Electoral, a la Ley de Partidos Políticos y al artículo 151 de la Constitución de El Salvador, en el que se pide "estar afiliado a uno de los partidos políticos reconocidos legalmente". Los observadores lo justifican diciendo que el Estado debe hacer efectivos el derecho y la oportunidad de sus ciudadanos para participar en asuntos públicos y ocupar cargos públicos.

5. "Desvincular los medios de comunicación estatales del control directo del gobierno y convertirlos en medios que desempeñen un verdadero servicio público con independencia editorial".

Los representantes de la Unión Europea escribieron en su informe que los medios de comunicación del Estados salvadoreño, TVES y RNES, "favorecieron claramente a Hugo Martínez y al partido del Gobierno".

También tuvo recomendaciones para los medios de comunicación privados: regular el acceso equitativo de los partidos y candidatos a los medios, imparcialidad en la cobertura de los procesos electorales y fortalecer la verificación de hechos y noticas para minimizar las noticias falsas y las campañas de difamación.

6. "Mejorar la capacidad del TSE para cumplir sus obligaciones de auditar la financiación política, incluida la publicidad en Internet, y adoptar sanciones adecuadas y proporcionales en caso de incumplimiento".

Para la Unión Europea, el TSE no tiene la capacidad de verificar oportunamente las fuentes de financiamiento de los partidos políticos, pese a que tiene la obligación legal de hacerlo. El trabajo se hace hasta meses después y las sanciones son "ineficaces y desproporcionadas".

El documento asegura que los partidos no pueden recibir dinero de empresas estatales, entidades públicas, instituciones religiosas, sindicatos y condenados por lavado de dinero o crimen organizado. Pero la multa de 16,000 dólares para esa falta es considerada "pequeña" e inefectiva para disuadir a los partidos de recibir donaciones ilegales.

El informe completo de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea, que consta de 66 páginas, puede descargarse en versión PDF en este enlace.