El director del Instituto de Derechos Humanos de la UCA, José María Tojeira, hizo algunas aclaraciones ante el comunicado de prensa emitido por el presidente impuesto de la Corte Suprema de Justicia, Óscar López Jerez, relacionadas al caso de la masacre de los jesuitas.

En el texto, Jerez informaba la admisión de la demanda presentada por el fiscal general contra la resolución de la Sala de lo Penal del 8 de septiembre de 2020, que ordenaba el cierre penal por el caso de la masacre cometida en 1989.

Sin embargo, el escrito también argumentaba que representantes de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) habían solicitado el indulto, el perdón de la pena y la conmutación de la pena en favor de una persona vinculada al asesinato.

Tojeira explicó en un editorial publicado ayer por la Universidad, que sí pidió, junto al actual rector de la UCA, Andreu Oliva, la conmutación de la pena para el coronel Benavides, por tratarse de un hombre "adulto mayor y enfermo" y por haber pasado ya más de cinco años en prisión. Sin embargo, negó que ambos hubieran pedido el perdón de esta y aseguró que el presidente de la CSJ mintió.

Jerez también destacaba en el comunicado que desconocía si quienes pedían la conmutación de la pena (Tojeira y el actual rector) tomaron en cuenta a la familia a la que estaban representando. A eso Tojeira sugirió facilitarle la dirección de su representado y de sus familiares.

Enfatizó, además que la UCA ha trabajado por más de 30 años en el caso de la Masacre de los Jesuitas para lograr llegar a la verdad y que si Fiscalía conoce sobre el caso es gracias al trabajo que ha realizado la Universidad.

La resolución del 8 de septiembre, además de ordenar el cierre penal, indicaba que no se investigara a los señalados como autores intelectuales de la masacre. Tojeira expresó también que se trataba de una sentencia corrupta, dada por jueces de la Sala de lo Penal "amigos de Jerez".