Steve-O anunició que ha decidido que sus implantes serán copa D y afirmó que ya tiene una fecha confirmada para la operación. En redes sociales ha generado todo tipo de comentarios, la mayoría negativos.
De entrada, mencionar Steve-O es sinónimo de controversia, de una locura, de bromas pesadas o de que alguien -probablemente- saldrá lastimado. Así que no es de extrañarse la más reciente revelación que hizo hace unos días.
El comediante y actor, que en junio pasado cumplió los 50 años de edad, contó a X5Podcast que tiene planes para un nuevo programa de televisión y, para eso, necesita hacer algo con su cuerpo: se colocará implantes mamarios para una nueva serie de bromas y hacer promoción para su gira de comedia, “Gone Too Far”.
“Hace unos años se me ocurrió la idea de operarme los senos y filmar un montón de videos con cámara oculta. Será realmente divertido conmigo usando varios disfraces, y luego revelando quién soy en realidad. (También) hacer piruetas de resistencia y todo eso”, describió entre risas y, adelantándose a las críticas aseguró que hasta ya ha hablado con un médico especialista considerado “el mejor del mundo en cuanto a dar pechos hermosos a los hombres”.
El comediante, que en 2013 visitó nuestro país, aseguró que ya tiene la fecha confirmada para realizarse el procedimiento donde se colocará implantes “copa D” y conservarlos durante “un máximo de dos meses”.
Como era de esperar, la decisión de Stephen Gilchrist Glover, mejor conocido como Steve-O, provocó una oleada de reacciones negativas. Para algunos de sus seguidores y usuarios de redes sociales con esto solo le falta el respeto a las mujeres que afrontaron enfermedades relacionadas o necesitan legítimamente aumentos de senos o mastectomías por haber sido víctimas de cáncer se seno.
“Como sobreviviente de cáncer de mama, encuentro esto repugnante. No todo el mundo se opera los senos simplemente para cambiar su apariencia, y nada de esto es divertido”, expresó una de las usuarias; mientras otra escribió: “No puedo enfatizar lo suficiente lo insensible que es someterse a un procedimiento que utilizan los sobrevivientes como un medio para reconstruir su cuerpo después de superar una enfermedad mortal. Es una forma de tomar a la ligera lo que se ven obligados a pasar y no tiene ni p*t* gracia”.
No importándole las opiniones de sus fanáticos, el actor que tuvo experiencias negativas por arriesgar su vida en las bromas pesadas que realizaba junto a otros miembros del reality show de MTV, a finales de los 90, aseguró: “Estoy decidido a llegar al menos hasta el final de mi próxima gira, que comienza este viernes. Y es el espectáculo más loco que he organizado nunca porque realmente explora lo que tengo que hacer con mi arte para cruzar la línea. Quiero que sepan que voy a cruzarla a toda velocidad”.
De hecho, la última controversia que protagonizó fue hace unas semanas, cuando le pidió a Post Malone tatuarle un pene en el rostro.
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