La modelo rusa se despojó de su lencería para promover a un diseñador.
Su pareja Bradley Cooper recién fue nominado a los premios Óscar en la categoría a mejor actor y aunque Irina Shayk es muy celosa con su vida personal, no es así con su trabajo sobre las pasarelas y la moda. Hace poco, la rusa, de 33 años, hizo una atrevida sesión fotográfica para rendir un llamativo homenaje a uno de sus mejores amigos y diseñador de cabecera, el francés Manfred Thierry.
Esto con el propósito de promover una exposición que se desarrollará desde el 3 de febrero en el Museo de Bellas Artes de Montreal, Canadá. Sin mayores accesorios que lucir, Irina sonrió juguetona frente a las cámaras sin ropa interior y el cabello más corto, un look conseguido con lo que parece ser una peluca.
"Es un honor haber sido parte de la primera exposición dedicada al diseñador francés Manfred Thierry", expresó en sus redes sociales donde las estampas siguen y ya acumulan cientos de reacciones. Ella optó por unas medias negras, tacones a juego y un vestido corto.
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