Sindicatos afirman que al menos 15,000 docentes presentan enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión. El ISBM 2023 brindó atenciones a más de 70,000 pacientes entre maestros y sus familiares.
Sindicatos de maestros dijeron que al menos 15,000 docentes padecen enfermedades crónicas son atendidos en el Instituto Salvadoreño de Bienestar Magisterial (ISBM) y que, pese a su condición, han decidido continuar laborando en las escuelas.
“Tenemos una crisis de salud. La mayoría de los maestros tiene estrés, diabetes; la mayoría de maestros presentan enfermedades terminales, enfermedades crónicas. Hay más de 15,000 maestros con enfermedades crónicas y Bienestar Magisterial lo establece (registra)”, dijo el pasado martes en la entrevista de Canal 21, Israel Montano, secretario general de ANDES 21 de Junio.
Carlos Olano, secretario general del Sindicato de Docentes por una Educación para Todos (SINDOPETS) también señaló que estima que un 30 % del magisterio padece enfermedades crónicas, donde a parte de la diabetes y la hipertensión arterial, también destacan el hipotiroidismo, artrosis, síndrome de colon irritable, lumbago crónico, entre otros.
“Hay maestros con enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, y (enfermedades terminales) como insuficiencia renal y otras. Me atrevo a asegurar que un 30 % del magisterio las padecen, hablamos de más de 12 mil docentes”, detalló el sindicalista.
Idalia Zúniga, del Frente Magisterial Salvadoreño (FMS), dice que “hay una buena población de compañeros que están sufriendo enfermedades crónicas”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) expone que las enfermedades crónicas, también llamadas enfermedades no transmisibles (ENT), suelen ser de larga duración y son el resultado de una combinación de factores genéticos, fisiológicos, ambientales y de comportamiento.
“Hay maestros con enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, y (enfermedades terminales) como insuficiencia renal y otras. Me atrevo a asegurar que un 30 % del magisterio las padecen, hablamos de más de 12 mil docentes”,
Carlos Olano, secretario general de SINDOPETS.
“Los principales tipos de ENT son las enfermedades cardiovasculares (como los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares), el cáncer, las enfermedades respiratorias crónicas (como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y el asma) y la diabetes”, expone el organismo en su sitio web.
La memoria de labores del ISBM de 2023 detalla que solo ese año brindó 71,713 consultas debido a enfermedades crónicas. Cabe resaltar que la cobertura de la institución incluye, además de los docentes activos, también a los pensionados y sus beneficiarios.
En las atenciones sobre enfermedades crónicas, a la cabeza está la hipertensión arterial con 17,480 consultas solo en el 2023. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) detalla que esta condición es uno de los factores de riesgo más importantes para las enfermedades cardiovasculares y la enfermedad renal crónica.
Después de este padecimiento, en segundo lugar en el nivel de atención que brindó el ISBM, está el síndrome de colon irritable -trastorno que provoca dolor en el abdomen y cambios en los movimientos intestinales- con 10,786 casos.
En el tercer lugar está la gastritis crónica -cuando el revestimiento del estómago resulta hinchado o inflamado- con 10,079 casos atendidos en el instituto.
Para los docentes la situación es preocupante, puesto que si bien estas enfermedades no son del todo incapacitantes, sí generan incomodidad en los pacientes.
“Sucede que la hipertensión y la diabetes se han disparado en los últimos años”, declaró Olano, quien agregó que el ISBM tiene problemas para entregar medicinas a sus los pacientes.
El pasado 22 de agosto, sindicatos de docentes denunciaron desabastecimiento de medicamentos.
Paz Zetino Gutiérrez, de Bases Magisteriales, dijo que en ese momento se reportó el 35 % de desabastecimiento.
CONTINUAR TRABAJANDO
Para Olano una de las razones por las cuales los docentes continúan trabajando, pese a padecer enfermedades crónicas, es por que, al retirarse, la pensión que recibirán no es suficiente para cubrir todos sus gastos y deciden seguir trabajando.
“Debido a las pobres pensiones que recibe un docente al pensionarse, no le cubre sus necesidades, por tanto siguen laborando, eso hace un magisterio envejecido y enfermo”, detalló el maestro.
“La pensión que le queda al docente es una pensión mínima de $304.17 eso es lo que reciben los maestros que retiraron su 25 % (de su pensión), entonces el que no lo retiró tiene la oportunidad que su pensión le quede hasta $400, pero no pasa de ahí”, dijo Montano, de ANDES 21 de Junio.
“Esa es la triste realidad, es la que hace que los maestros no se vayan. Yo tengo maestros amigos que me dicen: ‘Montano yo no me voy a ir, yo voy a morir encima del escritorio, yo voy a morir dando clase, porque si yo me pensiono me voy a morir de hambre. Con $304 no me alcanza para vivir si ahorita gano $1,100’”, añadió.
En ese sentido, el representante de ANDES 21 de Junio pidió al Estado que revise las pensiones. “Se debe analizar el tema previsional de los trabajadores”.
OTRAS ENFERMEDADES
La memoria de labores de 2023 del ISBM también da cuenta que tanto docentes activos, como pensionados y sus beneficiarios han consultado por enfermedades agudas, las son consideras que se presentan con un comienzo súbito y una evolución rápida y son de corta duración.
Para el caso, en primer lugar están las atenciones brindadas por enfermedades respiratorias agudas superiores, con 106,810; le sigue las infecciones de las vías urinarias, con 11,336; y en tercer puesto, las diarreas o las enfermedades gastrointestinales agudas, con 10,499.
Por otro lado, el documento también detalla las atenciones que se brindaron en los centros de salud, tanto públicos como privados, que son proveedores del ISBM.
En los hospitales públicos el mayor número de consultas fueron por traumas múltiples, con 1,901; síndrome febril agudo (elevación de la temperatura corporal más allá de lo normal y es causada, muy frecuentemente, por las enfermedades infecciosas y otras condiciones no infecciosas que desencadenen la respuesta inflamatoria), con 1,422; diabetes mellitus, 1,339; dolor abdominal, 1,033; y hipertensión arterial, 1028.
Mientras que en los hospitales privados que asisten al ISBM, la mayor cantidad de atenciones a sus cotizantes y beneficiarios se registraron debido a traumatismos, 1,001; diabetes mellitus, 911; gastroenteritis, 910; hipertensión arterial, 852; y dolor abdominal con 606.
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