Loading...

Drácula, el vampiro que inmortalizó Bram Stoker, cumple 117 años hoy

El 26 de mayo de 1897 se publicaba la novela Drácula del irlandés Bram Stoker. Con ella nacía el mayor mito del terror que desde sus inicios cautivó y aterrorizó al mundo entero por igual, formando desde entonces, parte de la cultura popular. 

Enlace copiado
Enlace copiado

Pese a la creencia de que la novela Drácula de Bram Stoker fue el primer relato de vampiros, estos misteriosos seres ya habían aparecido antes. Su antecedente “El Vampiro” (1816) lo escribió un desconocido John Willian Polidori, médico de Lord Byron, del que se burlaba constantemente el poeta, y que se suicidó a los 25 años, pese a su quizás prometedora carrera al que siguieron otras series de versiones. 

Pero al famoso vampiro, Drácula lo dio a conocer el escritor irlandés Bram Stoker, quien a finales del siglo XIX recreó una peculiar versión del verdadero príncipe Vlad Tepes, en su novela gótica, la novela de terror y romántica, más hermosa jamás escrita.

Desde entonces no ha dejado de publicarse, ha sido traducida a más de cincuenta idiomas y vendido alrededor de doce millones de libros.

Un día como hoy, pero de1897 se publicaba la novela Drácula del irlandés Bram Stoker. 

Sin embargo, permaneció en el terreno marginal y solo en 1983 fue incorporada ya entre los clásicos por la Universidad de Oxford. Su protagonista el conde Drácula se volvió el arquetipo del vampiro occidental por antonomasia.

Stoker pudo inspirarse para la recreación del personaje, al menos así lo aseguran los estudiosos del tema, en el príncipe rumano, Vlad III de Valaquia, conocido como Vlad el Empalador, famoso por su crueldad con sus enemigos a los que torturaba y mataba por empalamiento. 

Vlad Tepes se convirtió en la inspiración para los vampiros debido a sus prácticas violentas para castigar a sus enemigos, sobre todo su preferencia por empalar sus cuerpos.
Pero la historia del conde Drácula entraña una apasionada historia romántica, la de un noble que pierde al amor de su vida y consigue transformase en un ser inmortal, sanguinario, seductor de mujeres con la intención o como medio de encontrar en ellas a la amada que perdió.

La figura del vampiro viene de las leyendas y las supersticiones, referentes a que eran personas que habían hecho algún tipo de pacto con el demonio como medio para poder vencer a la muerte. Para que eso ocurriera debían consumir sangre humana.

Salto al cine 

Después llegaron exitosas novelas fantásticas como “Entrevista con un vampiro” (1973), escrita por Anne Rice, y llevada al cine, personajes como Louis o Lestat. Su influencia sigue vigente y se ha extendido al cómic y los videojuegos.  

Tanto fue el éxito del libro de Anne Rice “Entrevista con un vampiro” (1973) que en 1994 fue llevada al cine.

Los vampiros llevan siglos asustándonos y encantándonos desde la gran pantalla a partes iguales. Su figura ha tenido múltiples revisiones, pasando del terror inicial, la encarnación de un ser monstruoso, con grandes poderes y habilidades para evolucionar con el tiempo en un ser casi entrañable que presentan las series de televisión, sometido a continuas actualizaciones, aumentando sus poderes, como las secuelas de John Carpenter, incluso las recientes relecturas que humanizan esta figura, más amables y familiares como la famosa saga “Crepúsculo”. 

Con el tiempo, la figura del vampiro dejó de ser aterradora y se convirtió en un elemento de la cultura popular, esto gracias a la manera seductora, magnética y elegante con la que se le ha representado en el cine, en especial cuando se convirtió en el Conde Drácula.

La popularidad de su personaje fue tal que ha sido adaptado al cine, teatro, cómics y a la televisión.

La primera película que se inspira en Drácula fue “Nosferatu”, dirigida por F.W. Murnau en 1922, desde entonces el vampiro se ha ido perfilando y cada actor que lo ha encarnado le ha aportado algo sobre el original.

La actuación de Max Schreck como el conde Orlok en “Nosferatu” (1922) fue de premio Óscar, aunque los premios no se entregarían hasta 1929.

Los tres actores que mejor lo han interpretado en el cine, y que son ya leyendas, fueron; el gran Bela Lugosi, un clásico, y el responsable de convertir en 1931 al vampiro en el “villano” perfecto y en uno de los monstruos más amados por los fans; después en 1958 lo interpretó Christopher Lee, el actor de “Star Wars” y “Lord of the Rings”, que gustó a todos, hasta que en 1992 Gary Oldman en la película de Francis Ford Coppola, la versión más fiel a la novela original y una de las más famosas sobre Drácula sin duda gracias a la gran interpretación de un Oldman irreconocible por la espectacular caracterización, lo interpreta como un vampiro muy perturbado y perturbador con una apariencia elegante y seductora. 

Gary Oldman se convirtió en el Drácula de Francis Coppola en 1992, la película también fue protagonizada por Winona Ryder, Keanu Reeves y Antony Hopkins.

En cuanto a series, dos actores destacan en este papel: Jonathan Rhys Meyers y Claes Bang, ya un Drácula más moderno, que después de pasar siglos atrapado, llega al mundo moderno y debe descubrir una nueva forma de conseguir víctimas, cuando éstas ya no temen ya a los vampiros. 

Uno de los vampiros, medio hombres más conocidos es Blade, a quien da vida en la pantalla el actor norteamericano Wesley Snipes. Y el caso de Edward Cullen o los hermanos Salvatore, son vampiros que van al instituto a plena luz del día y conquistan a las nuevas generaciones. Pero Drácula no solo infunde terror; su figura también despierta deseo. La imagen del vampiro seductor que transforma a sus víctimas en amantes inmortales ha perdurado a través de los años, manteniendo su atractivo tanto en la literatura como en el cine.

Edward Cullen (Robert Pattinson) se encargó de atraer a los jóvenes a este mundo de Drácula. 

Son seres “no-muertos”, inmortales, seres fantásticos cuyas morfologías varían dependiendo de la zona en el que se inspiren, pero sin perder rasgos en común que les hace reconocibles: Vivir de noche porque el sol los destruye; alimentarse de sangre que extraen con sus prominentes colmillos; pánico a los crucifijos y a la luz del día y no quedar reflejada su imagen en un espejo....

Pero ¿hay testimonios realmente de su existencia? Mito y realidad

El mito de Drácula ha trascendido fronteras y épocas. Según Fernando Gómez, autor de “La vuelta al mundo en 80 cementerios”, el cementerio de Highgate en Londres tiene supuestos casos de vampirismo. Además, en Celakovice, cerca de Praga, se encuentra un cementerio exclusivo de vampiros con tumbas que muestran signos de medidas drásticas para evitar su resurrección.

Gómez asegura que en el cementerio de Highgate (Londres) hubo dos casos de vampirismo y afirma que “fue en el cementerio británico de Santa María la Virgen, en Whitby, donde Bram Stoker se inspiró para escribir Drácula”.

Cementerio del barrio judío de Praga. Este camposanto se encuentra entre los cementerios judíos más antiguos que se conservan en el mundo. Se fundó en el siglo XV. FOTO: EFE

“Cerca de Praga, en Celakovice (República Checa) está el primer cementerio exclusivo de vampiros, catorce tumbas con cuerpos atados boca abajo, con la cabeza cortada, algunos con clavos incrustados en el cráneo, otros con estacas en el corazón, y uno con un cuchillo clavado en la boca”, explica Gómez.  

Y por último citar a Madame LaLaurie, una de las supuestas vampiras más aterradoras de América, que asesinó a decenas de esclavos, practicándoles incisiones para extraerles sangre en la que bañarse, está enterrada en el cementerio de San Luis en Nueva Orleans (Estados Unidos). 

La historia de Vlad Tepes, el príncipe rumano que se convirtió en el vampiro más famoso de todos los tiempos fue llevada al cine hace una década con Luke Evans como protagonista. La película dirigida por Gary Shore, narra la trágica vida de Vlad, qué dilemas tuvo que afrontar y cómo se convirtió en un vampiro 

El mito de Drácula y todas sus leyendas generadas han evolucionado desde su origen literario hasta convertirse en un icono cultural, adaptado innumerables veces en cine, teatro, cómics y televisión. Su influencia perdura, transformando y redefiniendo la figura del vampiro más querido en cada nueva generación.

Tags:

  • Drácula
  • Película

Lee también

Comentarios

Newsletter
X

Suscríbete a nuestros boletines y actualiza tus preferencias

Mensaje de response para boletines