Magistrados de la Corte Suprema de Justicia de Costa Rica rechazaron tener una reunión con el presidente Nayib Bukele durante el viaje que el mandatario salvadoreño realizará a suelo costarricense en los próximos días. Así lo consignó en su edición del viernes el periódico La Nación de Costa Rica, que citó a fuentes judiciales que confirmaron la intención de Bukele de sostener una reunión con los magistrados pero la negativa de estos a recibirlo.

Según La Nación: “luego de consultas hechas a los magistrados, se determinó que no había disposición a celebrar un acto con el salvadoreño, debido a que este atacó la independencia del poder judicial de su país y choca con los valores del sistema costarricense”.

Una de las fuentes consultadas por La Nación relató que solo un magistrado mostró disposición a reunirse con el salvadoreño, quien cumplió recientemente cuatro meses de haber iniciado su segundo mandato, pese a la prohibición constitucional. 

“El mayor grupo comentó que no participarían en algo así por lo que Bukele representa”, añade el periódico costarricense en su publicación.

La visita de Bukele a Costa Rica fue anunciada en julio pasado por el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, aunque en ese momento indicó que todavía no tenían definida la fecha de la misma.

El viaje de Bukele a Costa Rica era parte del listado que la Asamblea recibió cuando le aprobó la licencia de viajes tras asumir su segundo mandato, el pasado 17 de julio. Junto con ese, también le autorizaron viajes a la Asamblea de las Naciones Unidas de este año, a Argentina, Paraguay, Corea, India y Singapur.

De este listado, los últimos cuatro viajes aún no se han efectuado y no hay fecha oficial para los mismos.

Además, en dicho permiso, la Asamblea autorizó a Bukele a realizar viajes, cualesquiera que estos fuesen y sin necesidad de pasar por conocimiento de la Asamblea, hasta abril de 2027.

En su reciente viaje a Argentina, Bukele sostuvo reuniones con los poderes legislativo y judicial, ante quienes defendió la aplicación del régimen de excepción y desestimó los cuestionamientos al mismo por las acusaciones de violaciones a derechos humanos y al debido proceso de personas detenidas que denuncian haber sido arrestados de forma arbitraria.