El área de neonatología poniente del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom fue reinaugurada ayer luego de un donativo de TELUS International El Salvador gestionado por la Fundación Latidos de Esperanza.
La inversión asciende a $49,500 y con la obra serán beneficiados más de 560 recién nacidos, de menos de 28 días de edad, que utilizan esa área al año y cuya estadía hospitalaria ronda los 18 días.
"El área fue transformada por completo. Se cambiaron los techos, las luminarias, se demolieron paredes para poderlo ampliar y crear nuevas áreas, como una para el descanso del personal, como un área para lactancia", detalló la directora ejecutiva de la Fundación Latidos de Esperanza, Ivonne López.
"Gracias a la ampliación del lugar se van a poder implementar programas de alto impacto, como Mamá Canguro, Lactario y Estimulación permanente. Esto quiere decir que hoy madres y padres van a poder acompañar a sus hijos las 24 horas, que era algo que no podía ser, solo podían permanecer 30 minutos y una vez al día en el servicio de lactancia, por ejemplo", agregó.
Mamá Canguro, por ejemplo, es una técnica de atención del neonato en situación de bajo peso al nacer y/o prematurez que se fundamenta en el contacto piel con piel entre la madre y el bebé.
Además de la construcción de la zona de lactancia y del área de descanso para los médicos residentes, la obra también comprende la expansión del área de incubadoras, área para examen de audiometría y el remozamiento del área de estar de enfermería; así como la instalación de nueva infraestructura de bioseguridad por la pandemia de coronavirus y sistemas de oxigenación.
"Este proyecto es un fiel espejo de que somos capaces de dar en el lugar donde vivimos y trabajamos, como parte de nuestro ADN y nuestra cultura laboral", anotó la gerente de Responsabilidad Social Empresarial de TELUS International El Salvador, Fiorella Amaya.
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