El Fondo Monetario Internacional (FMI) mantuvo este martes la tasa de crecimiento económico del 3% esperado para El Salvador en 2024, según su informe de Perspectiva Económica Mundial de octubre. 

En abril pasado, el organismo ya había mejorado la perspectiva para El Salvador, pasándola de una tasa de crecimiento de 1.9% a 3%, sin destacar acciones particulares que hayan motivado esta mejora. 

En la región, el FMI también mantuvo la tasa de crecimiento para todos los países, a excepción de Nicaragua, que en abril pasado tenía una perspectiva de crecimiento de 3.5% y en octubre, la elevó a 4%. 

El informe de este martes indica que la economía de Guatemala crecerá 3.5%, la de Honduras crecerá 3.6%; Costa Rica tendrá un crecimiento de 4% y la de Panamá será de 2.5% de su PIB.  

Para el caso de El Salvador,  el porcentaje de 3% es similar al crecimiento que ha proyectado el Banco Central de Reserva para final del año. Según el presidente de la institución, Douglas Rodríguez,  la economía tendrá un crecimiento económico de entre 3.5% y 4%. 

No obstante, los economistas siguen de cerca la evolución de los indicadores económicos y dudan que el país logre un crecimiento superior al 3%, tomando en cuenta que muchos de estos se han desacelerado, como el IVAE, las remesas y las exportaciones. 

Al segundo trimestre del año, la economía creció 1.4%, menos de la mitad de lo que creció en el primer trimestre (3% cifra revisada al alza). 

"En lo que va de 2024 tenemos cifras publicadas por el BCR que indican que al segundo trimestre no se ha alcanzado el 3 % de crecimiento. No hay nada que nos pueda indicar hasta el mes de agosto que la economía pueda crecer al 3 % en 2024 y tampoco hay nada que nos pueda indicar que la economía de Estados Unidos nos vaya a impulsar en lo que resta de 2024", afirmó el economista Luis Membreño en una de sus recientes columnas de opinión. 

Perspectivas mundiales 

A nivel mundial, el FMI asegura que la proyección de crecimiento para 2024 y 2025 será del 3.2%. “Se prevé que el crecimiento mundial se mantenga estable, pero en tasas decepcionantes”, señaló en el informe. 

El organismo señala que los conflictos, los disturbios civiles y los fenómenos meteorológicos extremos han dado lugar a revisiones a la baja de las perspectivas para Oriente Medio y Asia Central y para África subsahariana.

“El pronóstico más reciente de crecimiento mundial a cinco años, del 3.1%, continúa siendo mediocre en comparación con el promedio observado antes de la pandemia.

Sobre la ola inflacionaria, que afectó a todo el mundo después de la pandemia, el FMI señaló que los precios de los bienes se han estabilizado, pero la inflación de los servicios se mantiene elevada en muchas regiones, “lo que pone de manifiesto la importancia de entender las dinámicas sectoriales y de calibrar la política monetaria”, indicó.