El recargo por la congestión en los puertos de Acajutla y Corinto que aplicará Maersk a partir del próximo 17 de noviembre, según un aviso distribuido por la naviera entre sus clientes en el país.
La naviera Maersk informó que implementará un recargo por la congestión que presentan los puertos de Acajutla, en El Salvador, y Corinto, en Nicaragua, a partir del próximo 17 de noviembre.
La medida aplicará para toda la carga desde y hacia ambas terminales, según un aviso que la compañía envió a sus clientes y al que LA PRENSA GRÁFICA tuvo acceso.
En su comunicación, Maersk asevera que la decisión obedece a los “continuos desafíos operativos” en los referidos puertos, los que incluyen tiempos de espera de entre siete y 10 días.
Esta situación fue reportada por el sector privado salvadoreño hace varias semanas, aunque matizando que el problema de congestión afecta a todos los puertos del Pacífico e incluso otras zonas del mundo.
El recargo aplicará a las tarifas tanto de importación como de exportación y será de $1,000 para todos los tipos de contenedores.
“Esto permitirá a Maersk continuar trabajando en medidas para disminuir el impacto de estas condiciones operativas adversas, incluyendo seguir teniendo llamadas regulares en los puertos dentro de las rotaciones estándar de nuestros servicios”, indicó la naviera en la circular fechada el pasado 18 de octubre.
El puerto de Acajutla es el principal puerto de El Salvador, y una de las terminales marítimas menos eficientes de América Latina y del mundo en cuanto a la atención de buques, de acuerdo con el Índice de Desempeño de los Puertos de Contenedores (CPPI en inglés), elaborado por el Banco Mundial y la Unidad de Inteligencia de Mercados de S&P Global.
Este índice es un comparativo basado en datos en el que se clasifican a 348 puertos de contenedores de todo el mundo, según su eficiencia, medida por el tiempo transcurrido desde que un barco llega al puerto hasta que abandona el puesto de atraque luego de haber completado su intercambio de carga.
El puerto de Acajutla se ubicó en la posición 288 entre los 348 puertos evaluados en el 2022; en donde la posición 1 es el puerto con el mejor desempeño —en este caso la terminal Yangshan de China— y la posición 348 es el puerto peor evaluado.
En la región de América Latina y el Caribe, Acajutla se ubicó en la posición 63 entre los 66 puertos incluidos en el ranking. En el índice del año 2021, el puerto de Acajutla figuró en la posición 269, pero en esa ocasión las terminales evaluadas fueron 370.
El puerto de Acajutla opera con costos más altos que sus competidores más cercanos. En esta terminal salvadoreña el costo para carga o descarga de contenedores ronda los $118, versus $85 de Puerto Quetzal (Guatemala), $52 de Puerto San Lorenzo (Honduras) y $60 del Puerto Santo Tomás de Castilla (Guatemala), según un diagnóstico del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Según un estudio reciente del BID, el puerto de Acajutla presentó un rendimiento de carga de 5.75 ton/año/m2, muy por debajo de puertos Centroamericanos (Caldera de Costa Rica 22.65, Cortés de Honduras 24.6; siendo el referente internacional promedio 64.49).
“Las deficiencias de operación hacen que los tiempos de carga, descarga, y permanencia de contenedores en el puerto de Acajutla sean elevados, generando presiones de capacidad y ralentizando la operativa de muelle”, reza el documento del BID.
La Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (CAMARASAL) comentó hace unos días que el puerto de Acajutla no es el único que enfrenta problemas de saturación en el manejo de la carga en este momento. El problema de los congestionamientos en las terminales marítimas es regional, recalcó la gremial.
En 2024, el comercio internacional ha seguido enfrentando desafíos luego de los cambios que trajo consigo la pandemia del covid-19.
Durante los últimos meses se han reportado retrasos en el transporte marítimo, hay saturación en puertos que funcionan como centros de distribución regionales y continúa la expectativa pese al retorno de la “normalidad” en el tráfico de buques por el Canal de Panamá.
La reciente huelga en los puertos de la costa este de Estados Unidos y del golfo de México, que de momento está en pausa, también ha impactado, aunque solo fue de dos días y medio.
La protesta fue suspendida mientras las partes negocian nuevas condiciones laborales. Este jueves, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) reportó que el comercio mundial de bienes sólo creció un 1% entre enero y julio de este año.
Con el choque pandémico, el comercio mundial se contrajo un 5%, rebotó al 9% en 2021, pero cayó a 1.2% en 2023.
Esto se explica, en parte, por las tensiones geopolíticas, las disrupciones en las cadenas de valor, perturbaciones en lagunas de las principales rutas del comercio marítimo mundial, altos precios de energía, niveles inflacionarios que mantuvieron tasas de interés altas en la economía internacional”, explicó José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la CEPAL.
Hasta el 13 de octubre de 2024, el puerto de Acajutla había movilizado más de 4.2 millones de toneladas métricas de carga, tanto de importación como de exportación, según cifras publicadas por la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA).
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