El capitán del Cangrejera de la segunda división y hermano de los detenidos pide ayuda para aclarar que ellos son inocentes.
Sebastián Romero, capitán del equipo de fútbol Cangrejera de la segunda división y ex seleccionado sub-17 y sub-20 de El Salvador, hizo un llamado a la justicia tras la detención de sus hermanos bajo el cerco militar impuesto en San Marcos. Esta detención se produce en un contexto de operativos de seguridad destinados a combatir la violencia en la zona, pero Sebastián afirma que su familia ha sido víctima de una confusión que ha afectado a muchas personas en la zona.
La captura ocurrió el lunes por la mañana, cuando la policía arrestó a Gerardo Antonio Romero, de 27 años, y a Paolo Alexarder Romero, de 22, en la Terminal del Sur, donde trabajaban en un punto de taxis. Sebastián, quien además ha jugado en primera división con la UES, relató que la policía llegó sin mostrar órdenes de captura y llevó a sus hermanos a la delegación de San Marcos, conocida como "La Campanita", antes de trasladarlos a las bartolinas de San Salvador, conocidas como "el Penalito".
Según el relato de Sebastián, su padre, Edwin Omar Aragón, recibió una llamada de los compañeros de sus hermanos para informarle sobre la situación. Al llegar, las autoridades le dijeron que sus hermanos habían sido "perfilados como pandilleros" y que la situación era complicada.
"Mis hermanos no tienen antecedentes penales, nunca han tenido problemas con la ley. Son personas de bien", insistió Sebastián, quien destacó que Paolo es el portero titular del Atlas de Santiago Nonualco en la tercera división profesional y que ha estado entrenando con la reserva de Alianza y Santa Tecla, además de destacar en la ADFA de San Marcos.
"El mayor temor es que, sin investigar, se los lleven al penal de Mariona y queremos que se sepa que son inocentes", dijo Sebastián.
Aunque no han recibido amenazas directas de la policía, el ambiente es tenso, y las autoridades les han advertido que deben aceptar la situación. "Los policías nos dijeron que ellos hacen su trabajo, que no hay nada que hacer, y que no intentemos hacer cosas por ellos porque están perfilados como pandilleros y agrupaciones ilícitas", agregó.
A pesar de la adversidad, la familia ha recibido apoyo en redes sociales, incluidos mensajes de respaldo del equipo Atlas y de otros colegas futbolistas. En una publicación reciente, el Atlas expresó su preocupación: "Paolo Romero fue detenido injustamente mientras se encontraba trabajando, como parte de un cerco militar en la zona de San Marcos. Sin presentar ninguna prueba ni llevar a cabo una investigación adecuada, las autoridades lo han acusado y retenido arbitrariamente. Paolo es conocido por su compromiso con su equipo y su comunidad, y esta situación no solo afecta a un joven deportista con aspiraciones, sino que también genera dolor e indignación entre quienes conocen su integridad. ¡Pedimos la liberación de Paolo Ruano Romero ya!".
"Quiero que el presidente Nayib Bukele nos ayude a liberar a mis hermanos. No son pandilleros, son personas de bien", expresó Sebastián, visiblemente afectado por el sufrimiento que esta situación ha causado a sus padres.
Sebastián también compartió que han llevado alimentos a sus hermanos en la detención, pero la angustia por la posible transferencia al penal de Mariona es constante. "Es doloroso ver a mi madre y a mi padre sufrir por algo que no es cierto", concluyó.
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