El Ministerio de Hacienda se ha puesto como meta que los ingresos totales del Sector Público No Financiero (SPNF) alcancen un 26.3% del producto interno bruto (PIB) para 2027, de acuerdo con el plan fiscal que ejecutará en los próximos tres años.

En 2024, estos ingresos alcanzaron el 25.6% del PIB, según la institución. En el documento, la entidad plantea que el plan para aumentar los ingresos fiscales tiene tres objetivos: “mejorar el desempeño de la recaudación, promover la eficiencia tributaria y ampliar la base tributaria”.

Para esto propone un “uso eficiente de herramientas de fiscalización y de reducción de la evasión fiscal, la ampliación de la base tributaria, la incorporación de la economía digital al sistema tributario, entre otros”, sin brindar más detalles.

Uno de los planes en marcha es la factura electrónica. En este caso, el plan dice que los grandes contribuyentes deben de concluir su incorporación a este sistema en 2025.

A la fecha más de un 97% lo ha hecho. Para este año también está prevista la incorporación del “resto de instituciones del Estado, los principales medianos contribuyentes y profesionales libres”, detalla la institución en el documento.

Hacienda dice en su plan que en 2026 y 2027 “se evaluarán otras acciones orientadas a fortalecer la administración tributaria, disminución del gasto tributario y ampliación de la base que, junto con el rendimiento anual esperado de la facturación electrónica” prevé llegar a su meta de ingresos.

Siempre en este mismo periodo, la secretaría estatal proyecta que los ingresos tributarios aumenten un 0.5% del PIB y un 0.2% los ingresos no tributarios.

El plan fiscal reporta que entre 2019 y 2023 los ingresos totales del país pasaron del 22.9% ($4,913.7 millones) al 24.6% ($6,881.7 millones) del PIB, un incremento del 1.7% con respecto a este indicador.

Respecto a los ingresos tributarios, entre 2019 y 2023, Hacienda reporta que estos aumentaron de un 18.3% al 20.2% del PIB, un incremento acumulado de $1,968 millones, “siendo El Salvador el país con la carga tributaria más alta de la región, sin incrementar los impuestos”, dice la institución en el plan fiscal.

La cartera atribuye este resultado a  planes antievasión y  anticontrabando, la factura electrónica y leyes transitorias para facilitar el cumplimiento voluntario de obligaciones tributarias y aduaneras, conocidas como “amnistías fiscales”.