El hospital veterinario Chivo Pets reabrió sus puertas la mañana del domingo tras haber permanecido cerrado durante 12 horas por orden presidencial. El cierre temporal, que generó una fuerte ola de críticas e indignación en redes sociales, fue revertido al  mediodía del domingo, luego de que el presidente Nayib Bukele anunciara no solo la reapertura, sino también un incremento en el presupuesto destinado a la institución.

“He dado la instrucción de volver a abrir Chivo Pets e incrementar su presupuesto para garantizar un servicio aún mejor que el que ya se brindaba, que, según los nuevos comentarios, es excelente”, dijo Bukele en redes.

El hospital reabrirá desde este lunes a las 6: 00 a.m, según comunicado emitido, también en redes.

El cierre de Chivo Pets coincidió con el anuncio de la clausura de otras dos instituciones dedicadas a los animales, el Instituto de Bienestar Animal (IBA) y Polipet; tras el escándalo del maltrato en el refugio municipal de San Salvador Este.

La situación implicó la destitución del alcalde de ese municipio José María Chicas, el sábado por la noche en una decisión tomada de manera extraordinaria por el concejo municipal. Y al cierre de esta nota se desconoce si dejará sin efecto el cierre del IBA y la Polipet.

Financiamiento

El hospital veterinario, fue inaugurado en febrero de 2022, y según información oficial ha atendido a más de 3.6 millones de mascotas en sus tres años de funcionamiento.

Para este año 2025 Chivo Pets, contaba con un presupuesto de $10 millones, aunque Bukele anunció que se destinarán más fondos para fortalecer sus servicios. Sin embargo, no detalló el monto exacto del incremento ni el origen de estos recursos.

La economista Tatiana Marroquín cuestionó la falta de transparencia en el financiamiento de este hospital.
“Nunca se ha sabido con claridad de dónde provienen los fondos para Chivo Pets. El Gobierno ha dicho que es de las ganancias de bitcóin, pero hasta ahora no se ha vendido bitcóin ni se han reportado ganancias. En un contexto donde el Fondo Monetario Internacional exige recortes sustantivos, priorizar el bienestar animal sobre otras necesidades, como salud, educación o programas de protección para la niñez y la mujer, parece desproporcionado”, afirmó Marroquín.

El hospital costó $4 millones, según dijo el gobierno que aseguró que se había construido con las ganancias del bitcóin del Fidebitcoin; el fideicomiso creado para la convertibilidad; aunque se desconoce cómo se obtuvieron esas ganancias sin la venta de las divisas.

Uno de los compromisos adquiridos en el acuerdo con el FMI, indican que en julio de este año ese Fidebitcoin debería de estar liquidado; además, la Corte de Cuentas deberá publicar las auditorías del mismo.

Por otra parte, Marroquín también critica la distribución presupuestaria del Gobierno y señala que mientras instituciones como Salud, Educación y la Policía han sufrido recortes, la Presidencia y el Ministerio de Defensa han visto incrementos en sus asignaciones.

“Si hay que sacar recursos de algún lado, debería ser de las instituciones que crecieron, no de aquellas que atienden derechos humanos esenciales”, opinó.

A la espera

A pesar de la controversia, la reapertura de Chivo Pets ha sido recibida con alivio por los usuarios y las organizaciones animalistas.

El hospital se ha convertido en una referencia en atención veterinaria asequible, ofreciendo consultas y procedimientos especializados a precios simbólicos, según dijeron algunas de las personas que llegaron el domingo a tratar de pasar consulta o a esperar a sus mascotas que estaban internadas.

Por ejemplo, Patricia Ruiz, quien viajó desde Ilopango con su gata Blanquita, de dos años y medio contó que “aquí le extirparon un tumor por solo $10”. Y cuando aún no se sabía se su reapertura, señaló: “Es ilógico que cierren un hospital que ayuda tanto. No todos tenemos la posibilidad de pagar clínicas privadas”.

Cuando conoció que se reabriría, celebró la iniciativa, pero le preocupaba la estabilidad de la institución.  “Es una gran ayuda para quienes no podemos pagar una clínica privada. Espero que este hospital siga funcionando y que el Gobierno lo apoye, pero también que se transparente cómo se financia”, concluyó.