Su primera muñeca fue la Barbie Fun to Dress, de 1992. Desde entonces ha logrado coleccionar alrededor de 700 muñecas, especialmente aquellas que despiertan la nostalgia de su infancia.
Desde hace más de sesenta años, Barbie ha sido el juguete por excelencia. Lo que comenzó siendo una muñeca en 1959, pasó a ser un tesoro para coleccionistas y objeto de culto de la cultura popular.
Si alrededor del mundo existen personas que coleccionan a la muñeca más famosa, en El Salvador también las hay.
Delmy Callejas es una de ellas. En su caso “no fue una idea” coleccionar Barbies, “sino que simplemente fluyó”, y hasta el momento posee aproximadamente 700 muñecas.
“Desde que tenía 10 años me regalaron mi primera Barbie y siempre me gustaron mucho, sobre todo los accesorios a escala con marcas reales y su tamaño perfecto”, cuenta la salvadoreña.
Y aunque su colección es privada, es parte de un grupo de coleccionistas salvadoreños que tienen la intención de compartir su pasión por Barbie, especialmente con muñecas de los años 60, 70, 80 y 90, que les recuerdan a su infancia.
“La primera Barbie que tuve y que todavía conservo su toalla es Barbie Fun to Dress, de 1992, me la regaló una tía”, recuerda.
“Si investigas, lees revistas o libros de Barbie, se te hará un poco más fácil la búsqueda para identificarlas, además ahora en la web existe una amplia variedad de sitios con información precisa acerca de este tema”, menciona.
Según la salvadoreña, “en Barbie existe una variedad de etiquetas (Label) que representan líneas de muñecas”, y dentro de estas las ediciones de colección y de juego, como Black Label, Pink Label, Silver Label, Gold Label, por mencionar algunas.
“Las líneas de juego de Barbie de los 70, 80 y 90 son altamente cotizadas y deseadas, pues su calidad era muy superior a la actual, por lo tanto las características para coleccionar son de acuerdo a las muñecas que te gustan”, afirma.
“A la gente le gusta mucho saber acerca de la Barbie Totally Hair, de 1991-1992, la más vendida de todos los tiempos, entonces es una de las más queridas por el fandom de Barbie y mi persona”, destaca.
En cuanto a los cuidados básicos que se deben tener para conservar a las muñecas, Delmy explica que estas “deben cuidarse mucho del polvo y de altas temperaturas, pues estas deterioran el material y color”, y sugiere “que estén en un ambiente con temperatura controlada para su resguardo en el tiempo”.
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