Loading...

Más de Opinión

La importancia de los cuidados

Una de las principales tareas es la construcción de un Sistema Nacional de Cuidados para mejorar la calidad de vida de la población, especialmente de aquellas personas en situaciones de dependencia (niños, adultos mayores y personas con discapacidad), y promover una mayor equidad entre hombres y mujeres en las responsabilidades de cuidado.

Enlace copiado
Enlace copiado

De acuerdo con el Censo de Población 2024, los niños y adolescentes representan el 21.5 % de la población nacional, y el 14.8 % de los salvadoreños tienen 60 años o más (894,433 personas); de los cuales 512,765 son mujeres (57.3 %) y 381,668 son hombres (42.7 %). La publicación del BID (2025) Plan para la Construcción de un Ecosistema Emprendedor para los Cuidados de Largo Plazo en América Latina y el Caribe destaca la tendencia de que mujeres y hombres vivan cada vez más años.
Esta situación demográfica genera oportunidades y desafíos. La realidad es que hay una demanda cada vez mayor de servicios de cuidados para niños, adultos mayores y personas con discapacidad; es decir, apoyos personales para que mujeres y hombres que lo requieren puedan desarrollar las actividades básicas de la vida diaria. Otro punto es que la oferta de servicios de cuidado solo puede ser financiada parcialmente por el sector público, e incluso cuando el financiamiento es público, los servicios suelen ser prestados por actores privados. Esto significa que existen oportunidades de negocio en el sector de cuidados.
El estudio del BID sugiere comenzar con intervenciones estratégicas relativamente fáciles de implementar; por ejemplo, la creación de portales digitales públicos o privados para facilitar el encuentro de la oferta y la demanda, la definición de un contrato estandarizado para la persona cuidadora remunerada en el domicilio y la oferta de formación para personas cuidadoras. Al respecto, se recomienda iniciar con este tipo de intervenciones mientras se establece un ecosistema de cuidados.
¿Qué hace tan importantes los cuidados en El Salvador?
(a) Cuatro de cada diez niñas, niños y adolescentes viven en situación de abandono por uno o ambos progenitores.
(b) El 1.4 % de las niñas y niños de 0 a 3 años asisten a un centro de educación inicial.
(c) Hay más de 410,000 personas con alguna discapacidad, de las cuales más de 13,000 son niñas, niños y adolescentes que asisten a centros escolares.
(d) La mayor parte de las mujeres que brindan asistencia de cuidado no reciben ingresos por ese trabajo.
(e) Las pensiones no contributivas solo alcanzan al 12.4 % de la población con necesidad económica.
(f) La población total atendida por los Centros de Atención al Adulto Mayor es de 3,000 personas.
¿Por qué el trabajo de cuidados afecta tanto a las mujeres salvadoreñas?
Debido a que la división sexual del trabajo ha impactado negativamente en el desarrollo, empoderamiento y autonomía de las mujeres. Sobre ellas han recaído las tareas de cuidado dentro de los hogares. Veamos dos hechos contundentes:
(1) Las mujeres dedican más del doble de tiempo que los hombres a actividades no remuneradas de trabajo doméstico y de cuidados.
(2) Un 64.8 % de las mujeres no se encuentran trabajando ni buscando empleo, debido a que dedican tiempo al cuidado y trabajo doméstico.
El Salvador ha empezado a abordar esta problemática. En 2023 se aprobó la Política Nacional de Corresponsabilidad de los Cuidados, la cual busca reconocer y valorar los cuidados y el trabajo doméstico no remunerado, así como redistribuir los cuidados y generar nuevas oportunidades para la incursión de las mujeres en el ámbito laboral.
Reflexión:
Una de las principales tareas es la construcción de un Sistema Nacional de Cuidados para mejorar la calidad de vida de la población, especialmente de aquellas personas en situaciones de dependencia (niños, adultos mayores y personas con discapacidad), y promover una mayor equidad entre hombres y mujeres en las responsabilidades de cuidado. De ahí la pertinencia de aplicar el enfoque de las “tres R” recomendado por ONU-Mujeres: Reconocimiento del trabajo de cuidados no remunerado; la Reducción de dicho trabajo a través del desarrollo o profesionalización de servicios o prestaciones para el cuidado; y la Redistribución del trabajo de cuidados no remunerado entre hombres y mujeres.
 

Lee también

Comentarios

Newsletter
X

Suscríbete a nuestros boletines y actualiza tus preferencias

Mensaje de response para boletines